La tierra que nos constituye

Titixe (2018) de Tania Hernández Velasco


Por Ana Laura Pérez Flores

La tierra que nos constituye

Titixe (2018) de Tania Hernández Velasco


Por Ana Laura Pérez Flores

 

TAMAÑO DE LETRA:

¿Dónde habita la memoria? Las raíces personales y familiares encuentran lugares para fijarse: la casa donde crecimos, los pueblos, los objetos y espacios que forman parte de los momentos que recordamos. Sabernos de algún lugar es un punto de partida para narrar la historia propia.

Tania Hernández Velasco ancla su historia familiar en la tierra de sus abuelos y la reconoce como parte de su historia personal. A pesar de haber nacido y crecido en la Ciudad de México, sus raíces, como las de tantos habitantes de la urbe, están en otro lado. La búsqueda que plasma en su largometraje Titixe (2018) parte de un conflicto referente a esta parcela: cuando un terreno ya no puede dar más, ¿hay algo que nos siga atando a él?

El proyecto de una última cosecha familiar tras la ausencia del abuelo es una manera de buscar la permanencia de una certeza. «Titixe» es aquello que queda, los restos que uno rescata: lo que hace Tania es recolectar anécdotas e instantes para construir su propia historia, una historia que tiene que partir de la tierra y atravesar a las mujeres que la preceden. Vemos manos y pies entrelazándose con el suelo y las semillas, los unos dependen de los otros, la tierra es más que una proveedora, también nos constituye.

La cámara y el montaje de Hernández Velasco se permiten aproximarse a humanos y naturaleza de forma indistinta: lo que vemos es un todo armónico matizado por luces, texturas y relieves. Esta confluencia sirve para convertir la cinta en algo que se desprende de una simple militancia a favor de la preservación agraria y que aborda este elemento en términos que rebasan lo utilitario. Aquí, el crecimiento de los niños es equiparable al de los árboles, y la única vez que el abuelo fue visto llorar fue a causa de una cosecha fallida.

Esta familia, que busca lidiar con un vacío causado por el duelo, vive en la noción de que historia y tierra son inescindibles. Aun desde las grandes ciudades, nosotros somos también aquello que queda del pasado. Vale la pena escarbar para encontrar los pedacitos que nos permitan reconstruirnos. 

  • Clementina
  • El poder del perro
  • Adios al lenguaje-2